A medida que se acercan las fiestas más esperadas, la apertura oficial de la temporada de celebraciones suele estar marcada por el encendido de los árboles de Navidad públicos. En 2019, el árbol de Navidad de Vilna recibió el título de Árbol de Navidad más bonito de Europa. En esta ocasión, el árbol de Navidad será el reflejo de un año excepcional.
En lugar de invitar a las masas a una mágica ciudad navideña como en el pasado, este año se ha diseñado para ser admirado con seguridad a distancia. Mientras que el exterior es moderno, el interior de la instalación revela un árbol tradicional que asegura a todo el mundo que, a pesar de los cambios provocados por la pandemia, el espíritu navideño, como siempre, sigue siendo el mismo.
Visualmente, el árbol de Navidad parece un cuadro surrealista: una moderna composición de 24 metros de altura está rodeada de 6.000 ramas vivas y fragantes decoradas con casi 4 km de luces navideñas RGB que cambian de color, 800 adornos plateados y 150 m2 de espejos brillantes. La vanguardista instalación tiene en realidad dos vertientes: la colocación espacial de estructuras metálicas crea varias zonas adornadas con espejos, mientras que el interior adquiere un aspecto acogedor, hogareño e íntimo con un árbol de Navidad vivo decorado con piñas y farolillos. Para hacerlo ecológico, las luces se alimentan con electricidad generada procesando posos de café.
“Aunque ya nos hemos enfrentado a muchos retos a lo largo de este año lleno de acontecimientos, nuestra comunidad se ha hecho más fuerte, más unida y está preparada para una Navidad excepcional. El árbol de Navidad de Vilnius es exactamente eso: surrealista, inesperado y, sin embargo, asombroso”, afirma Remigijus Šimašius, alcalde de Vilnius.
Este año Vilna también está decidida a mantener vivo el espíritu navideño introduciendo formas alternativas y responsables de decorar y celebrar la ciudad: por ejemplo, las zonas de la ciudad bellamente decoradas invitan a dar un paseo relajado manteniendo el distanciamiento social, y las ferias navideñas virtuales están llamadas a sustituir a las reuniones multitudinarias y acercar el espíritu navideño a los hogares.
Para ejercer un ambiente seguro y responsable, preservando al mismo tiempo la alegría navideña, Vilnius ha tomado la difícil decisión de cancelar temporalmente algunos de los actos festivos -la tradicional ceremonia masiva de encendido del árbol de Navidad, los cuentos de hadas en 3D, el tren navideño- y trasladar otros a plataformas digitales (acto de encendido retransmitido en directo, feria navideña electrónica). La ciudad también ha pensado mucho en la decoración lumínica: las luces navideñas adornarán las calles desde el casco antiguo, el centro y los parques, hasta las casas y escaparates de los vecinos, e incluso zonas más alejadas de la ciudad.
Además, tras reagruparse en los esfuerzos por combatir el coronavirus retirando todas las concentraciones multitudinarias, Vilna aporta soluciones innovadoras aprovechando las ventajas de la realidad virtual y trasladando las tradicionales ferias navideñas a Internet, a una e-Feria de Navidad. Los compradores tendrán la oportunidad de adquirir regalos y productos originales que se habrían vendido en una auténtica ciudad navideña alrededor del árbol de Navidad. Esto hace que la disposición sea ideal para participar en las ferias navideñas de Vilna sin siquiera poner un pie fuera de casa.
Así pues, este año Vilnius pone todo su empeño en tener unas Navidades seguras con la esperanza de que el año que viene todos los visitantes puedan volver a la ciudad para disfrutar de los actos navideños en toda regla.
