El año pasado, el 10% de los puestos de trabajo y del PIB correspondieron a los viajes y el turismo en todo el mundo. Sin embargo, 197,5 millones de puestos de trabajo del sector podrían estar en peligro si se mantienen intactas las restricciones de viaje y las cuarentenas relacionadas con el virus corona, según el World Travel & Tourism Council.
El empleo en las islas del Caribe depende en gran medida del turismo. Más del 90% de los empleos en Antigua y Barbuda en 2019 procedían del turismo. En 2019, una de cada 10 personas trabajó en empleos relacionados con los viajes y el turismo, aportando 8,9 billones de dólares, es decir, alrededor del 10,3%, a la economía mundial.
En los últimos cinco años hasta 2019, el turismo fue responsable de uno de cada cuatro de todos los nuevos empleos netos creados a nivel mundial.
Esto fue antes de que el COVID-19 afectara a todo el mundo. Mientras que muchos destinos populares están dando la bienvenida a los visitantes de nuevo con mucha cautela, el turismo está siendo testigo de la disminución con respecto a los puestos de trabajo y los ingresos. Pero lo peor puede estar aún por llegar.
La OMT pronosticó en mayo que el número de turistas internacionales podría caer entre un 60% y un 80% en 2020.
El Consejo Mundial de Viajes y Turismo (CMVT) predijo en junio que podrían perderse unos 197,5 millones de puestos de trabajo en el sector turístico. Esta cifra se basaba en el “peor escenario posible”, en el que se mantendrían obstáculos como las restricciones generales a los viajes y las cuarentenas.
