Antes del comienzo de esta pandemia, trabajábamos desde nuestras respectivas oficinas, nos íbamos de vacaciones a explorar lo desconocido con nuestra familia, e incluso nos embarcábamos en viajes de aventura en solitario, haciendo escala en destinos lejanos. Este particular patrón de viaje dio forma a muchas industrias a su alrededor, ya fueran restaurantes, destinos turísticos, paquetes de cruceros, casinos e incluso el sector de los telares manuales de la región local. En la actualidad, todo esto está experimentando una desesperación sin precedentes a medida que el COVID-19 se convierte en la principal preocupación en todo el mundo.
Cuando el primer ser humano caminó sobre la tierra, la necesidad básica que deseaba era viajar por todo el mundo y al mismo tiempo familiarizarse con cosas nuevas en términos de alimento y refugio. En el escenario actual, el mundo que conocemos ha sido el resultado de miles de años de viajes, ya sea en busca de oro, petróleo y minerales que construyeron las industrias, o de islas inexploradas a través del mar para descubrir el misterio. Esta actividad de exploración ha allanado el camino a un desarrollo sin precedentes en todo el mundo. Esto, acompañado de los avances tecnológicos, ya sea en aviación o fotografía, junto con la irrupción de las redes sociales, ha hecho que cada vez más gente esté conectada y se cree el concepto de la Aldea Global.
Antes, las mentes jóvenes y las almas inquietas soñaban con tener una casa y un coche. En aquella época, viajar era más bien una actividad de ocio. Los millennials encontraron una forma diferente de gastar el dinero y fue viajando con el cambio gradual de los tiempos. Creen en vivir ligero, ahorrar dinero y viajar por todo el mundo. Esto llevó al turismo a ofrecer atractivas ofertas, paquetes y descuentos para atraerlos, ya que la renta media disponible entre los millennials es mucho menor que la de una persona de mediana edad. El concepto de “personas influyentes” en las redes sociales se hizo inmensamente popular, y la gente empezó a desentrañar lugares lejanos haciendo clic directamente en sus teléfonos inteligentes. Twitter desempeñó un papel crucial, ya que la gente se ponía en contacto directamente con la dirección del hotel y les comentaba sus buenas y malas experiencias.
