Bali es famosa por sus espectaculares paisajes, y la nueva legislación pretende protegerlos. Los funcionarios del gobierno han actualizado y reforzado recientemente las leyes sobre la altura de los edificios, y los lugareños han pedido que se retrase la construcción de un complejo turístico junto a la playa.
Las nuevas normas promueven el Reglamento Regional de la Provincia de Bali (Perda) nº 16 de 2009 relativo al Plan Regional de Ordenación del Territorio de la Provincia de Bali para 2009-2029. Dice que ningún edificio puede superar los 15 metros de altura para mantener el paisaje natural.
Aunque esta ley existe desde 2009, en el país sigue habiendo hoteles y edificios más altos que el máximo. Las normas actualizadas dicen que todos los edificios nuevos no deben superar los 15 m a menos que las autoridades den un permiso especial.
Las aguas cristalinas de Bali, su exuberante vegetación y sus extensos paisajes la convierten en un paraíso tropical. Los antiguos principios hindúes balineses son la base del sistema de gobierno del país e impulsan la formación y expansión de las comunidades.
Principios como el Tri Hatha Karana subrayan que la armonía entre la naturaleza, los seres humanos y el mundo espiritual debe guiar todas las acciones. Por ello, los promotores y arquitectos deben construir hoteles y edificios que respeten el entorno natural.
Además, los residentes de la playa de Sesesh, cerca de Canggu, se opusieron recientemente a la construcción de un importante complejo turístico en primera línea de playa. En su opinión, el proyecto turístico alteraría el entorno y el encanto de Seseh.
La petición ganó popularidad en Internet y en las redes sociales. En respuesta, los inversores del proyecto lo han suspendido por el momento.
El turismo de Bali casi ha vuelto a su nivel anterior a la pandemia. En 2019, los estadísticos balineses informaron de más de 1,8 millones de turistas extranjeros de enero a abril. En 2020-2022, las cifras cayeron por debajo de los 100.000. De enero a abril de 2023, se registraron 1,4 millones de turistas. Aún queda tiempo para que los niveles de turismo igualen los de antes de la pandemia, ya que la mayoría de los turistas suelen llegar de julio a diciembre.
Dado que el turismo es vital para la economía balinesa, mantener la belleza natural del país a medida que aumenta el número de visitantes será un acto de equilibrio continuo.
