La nueva Ley de Trabajo a Distancia facilita a los nómadas digitales de la UE trabajar para España

La nueva Ley de Trabajo a Distancia facilita a los nómadas digitales de la UE trabajar para España

Poder trabajar en otro país es clave a la hora de establecer una residencia de larga duración, pero muchas normativas dificultan notoriamente este proceso para los nómadas digitales. Recientemente, España ha puesto en marcha una nueva solución que pretende reducir las dificultades asociadas al trabajo en otro país para los ciudadanos europeos y, al mismo tiempo, allanar el camino para impulsar la accesibilidad del país a los nómadas digitales, a quienes se plantean obtener la nacionalidad española en el futuro y a otros visitantes de larga duración.

La nueva Ley de Startups de España pretende simplificar el proceso de permitir a los ciudadanos europeos venir a España con el propósito de involucrarse en una startup como trabajadores remotos. Esta ley ofrece a los europeos la posibilidad de conservar muchas de las prestaciones más esenciales de sus países de origen mientras viven en España, incluidas las prestaciones de la seguridad social y los beneficios fiscales.

Esta ley ha elevado significativamente la exención fiscal anual para los europeos que trabajan a distancia en España de 12.000 euros a 50.000, lo que significa que muchos trabajadores a distancia pueden pasar una parte importante del año trabajando en España sin tener que pagar impuestos o con unas necesidades fiscales mínimas. Esto puede contribuir en gran medida a simplificar el proceso de tramitación de impuestos cuando se trabaja y se vive legalmente en países diferentes.

El visado de trabajo a distancia y el sol de España atraen en masa a los nómadas digitales

Con esta ley, los europeos que trabajan para una startup mientras viven en España también pueden comprar acciones de una empresa startup sin pagar impuestos por ellas hasta que decidan venderlas. Esta estrategia hace que vivir en otro país sea más asequible económicamente para los europeos y aumenta su capacidad para financiar startups a través de acciones, lo que tiene el potencial de beneficiar significativamente a las pequeñas empresas españolas en una variedad de industrias.

Gracias a la Ley de Startups española, los aficionados al flamenco y las tapas tienen ahora aún más opciones para pasar hasta cinco años en su país favorito.