Como describe Poslovni Dnevnik, el alojamiento invernal en Dalmacia de grandes barcos turísticos se está convirtiendo en un problema alarmante en todo el Adriático croata. La gente, normalmente en Trogir, no está muy satisfecha de que cada año más y más barcos de este tipo se conecten en su paseo marítimo durante los inviernos, enfatizando un problema con la organización de turismo náutico croata de la zona. Los lugareños ya han empezado a burlarse de que el paseo marítimo de Trogir se haya convertido en el único astillero del mundo bajo protección de la UNESCO, según informa HRT.
La mitad del largo paseo marítimo de Trogir permanece ocupado durante todo el invierno por barcos turísticos amarrados en numerosas filas. Desde hace muchos años, el panorama es así, pero los barcos son cada vez más grandes y se amarran cada vez más en varias filas. Desde el paseo marítimo ya no se ve Ciovo, y desde Ciovo no se ve la ciudad, dicen los habitantes de Trogir.
El alcalde de Trogir, Ante Bilic, mencionó que durante los inviernos, ahora realmente ha superado todas las medidas. Además, existe el problema de que en invierno el paseo marítimo se convierte en un “mini astillero” abierto. Allí, todo el mundo está haciendo algún tipo de servicio o pintando sus embarcaciones. El centro de la ciudad, declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, no es el lugar adecuado para hacer este tipo de cosas.
Para que no haya incertidumbre, los habitantes de Trogir no se oponen a la presencia de enormes barcos turísticos, al contrario, se han convertido en una parte importante de la oferta turística.